Seamos sinceros. A todos alguna vez nos ha pasado.
En algún momento de nuestra vida profesional nos hemos encontrado dando vueltas en la cama haciendo este tipo de preguntas:
¿Estaré a la altura de las circunstancias?
¿Podré hacer realmente este trabajo?
¿Estoy lo suficientemente capacitado para intentarlo?
Es el famoso síndrome del impostor.
Hay una buena noticia. Existe un plan para superarlo y consta de 3 pasos.
- Admitir que puedes tener el síndrome y que es solo una postura mental.
- Entender que tienes en tus manos la posibilidad de cambiarlo.
- Iniciar y hacer algo al respecto.
Yo arranqué este blog ¿y tú que estás haciendo?