Emprender, Hábitos y Rituales, Liderazgo

Un pasaje al más allá

Los viajes por trabajo pueden ser una tortura.

Muchas horas de curro, escalas infinitas, romper con las rutinas de ejercicios y extrañar a tu familia o amigos.

Pero tienen algo muy positivo: cuando regresas, el que tienes delante de tu monitor, es una versión distinta del que se fue.  Saliste de tu oficina y pudiste ver tu realidad con otra perspectiva. Te cuestionaste y con seguridad te hiciste las preguntas importantes.

Entonces:

Si al regresar miras para abajo y sigues con el mismo excel, sin duda has perdido una oportunidad.

Si en cambio esas preguntas y cuestionamientos se vuelven iniciativas, proyectos o intenciones de cambio, ganaste mucho más que un viaje: creciste como persona y profesional.

Ok,  ¿Ya sabes cuál es tu próximo destino?

octubre 3, 2019